He conocido a algunos quiroprácticos y mi familia ha recurrido a ellos muchas veces, incluso de forma continuada en algunos casos. Recuerdo que un familiar tenía lo que el especialista traumatólogo calificaba de “codo de tenis”: un dolor persistente en un codo que no dejaba levantar el más mínimo peso y era causa de mucho sufrimiento, agravado por el hecho de no haber jugado al tenis ni una sola vez en la vida. Pedro Duque, Ingeniero Aeronáutico Astronauta de la Agencia Europea del Espacio
Quiropráctica: PRÓLOGO A LA EDICIÓN ESPAÑOLA
8 septiembre, 2015
No Comments
